Diez mitos del SEO derribados por un experto
Buscar algo en Google y hacer clic en el primer resultado de la lista es algo tan cotidiano –y hasta automático- que muchas veces no percibimos el complejo trabajo que hay detrás para que esa web logre estar en esa posición que nos invita a cliquear. Ese trabajo es la estrategia de SEO (Search Engine Optimization o, en español, Posicionamiento Orgánico en Buscadores), una serie de técnicas invisibles que tienen como objetivo que una web aparezca en el primer lugar de Google cuando hacemos cierta búsqueda vinculada al contenido de esa web.
La semana pasada asistimos al taller organizado por IAB acerca los fundamentos del SEO, a cargo de Bruno Dangelo. En su charla pudimos constatar que muchos clientes tienen ideas erróneas sobre el verdadero poder de SEO. Corresponde a todos los que trabajamos en la industria concientizar a nuestros clientes para derribarlas.
Mito 1: «El SEO es 100% manipulable»
Hace varios años, en Estados Unidos sobre todo, era muy simple manipular una web para que estuviera en las primeras posiciones de Google. El algoritmo era más conocido y los “expertos” sabían más exactamente cómo optimizar los factores SEO para conquistar los buscadores. Esto llevó a que los resultados de búsqueda se poblaran de contenido spam.
Con los algoritmos Pinguin y Panda, Google cambió las reglas de juego: ya no es tan sencillo manipular un sitio para que esté en la primera posición, ya que se da más prioridad al contenido y autoridad del sitio. Hoy Google comprendió que el mecanismo no es realizar un cambio drástico de algoritmo, sino ir haciendo pequeños ajustes permanentemente. Eso hace que el SEO ya no sea tan descifrable como en los orígenes de la profesión.
Mito 2. «El algoritmo de Google es impredecible»
Una creencia opuesta a la anterior: aunque es sumamente complejo, el algoritmo actual no es 100% impredecible, y podemos incorporar buenas prácticas para lograr un buen posicionamiento orgánico. El posicionamiento no es a suerte y verdad, ni a capricho del robot de Google. Además del SEO onpage (los títulos, densidad de palabras clave, descripciones y más), hay tácticas de SEO offpage en Redes Sociales y mediante el link building que nos ayudan a construir la autoridad de un sitio. Siguiendo la metodología adecuada, se puede mejorar la posición de un sitio y “agradar” a Google.
Mito 3: «Los sitios solo se posicionan en Google»
En Iberoamérica, este mito es casi verdadero: el 95% del mercado en español pertenece a Google. Pero el poderío no es tan absoluto a nivel mundial, donde Google tiene el 70% del mercado. Por ejemplo, en China y Rusia hay competidores más fuertes, y en Estados Unidos Bing tiene el 20% del mercado. Por lo tanto, siempre que hablamos de SEO en general hablamos de Google, pero hay que tener en cuenta que existen otros buscadores minoritarios y que también es posible posicionar en otros sitios como YouTube (que es la segunda plataforma con más búsquedas en el mundo).
Mito 4: «Alcanza con estar en Google»
El pedido de los clientes suele ser: “quiero estar en Internet”. Sí, hace algunos años, cuando el mercado digital estaba expandiéndose, lo importante era aparecer en Google. Ahora es algo obvio. Hoy todo el mundo está en Google: si no te destacás, desaparecés. Lo importante es aparecer en la primera página de resultados (los usuarios prefieren cambiar términos de búsqueda que ir a la segunda página). Y no solo eso, sino en la posición más alta posible: según las estadísticas, el resultado en primera posición tiene 16 veces más clics que el décimo (lo cual multiplica sus posibilidades de venta respecto al primero).
Mito 5: «El SEM mata al SEO»
¿SEM o SEO? Es frecuente este dilema entre optar por anuncios de Adwords (SEM) o por una estrategia de SEO para posicionar un sitio. La realidad es que el SEO genera más tráfico: el 80% de de clics son en resultados orgánicos, frente al 20% en los anuncios. Según estudios de comportamiento, el usuario suele percibir que el primer resultado orgánico “se ganó” el estar ahí, lo que genera más clics que el resultado pago.
De aquí surge otro mito fuerte: que si trabajamos SEM se debilita el SEO. La realidad es que no solo los anuncios de una web no afectan los resultados orgánicos, sino que un buen trabajo de SEO potencia el desempeño en Adwords. Por eso, es recomendable trabajar ambas estrategias en paralelo, ya que ambas se complementan.
Mito 6: «Cualquier palabra clave puede posicionarse»
El SEO no es una fórmula mágica automática para que nuestro sitio aparezca en las primeras posiciones bajo cualquier palabra clave. Hay que enfocarse en búsquedas que realmente tengan potencial según el volumen de tráfico (Google nos da buenas herramientas gratuitas para detectarlo), que nuestro público objetivo realmente busque según esas palabras, y que esté relacionada con nuestro negocio.
Mito 7: «Si hacemos un buen SEO Onpage, el contenido no importa»
Falso. Ante tanto spammer, y velando por la satisfacción de sus usuarios (que es el factor SEO más importante), las últimas actualizaciones de algoritmo han puesto mucho énfasis en la calidad del contenido, que hoy es la materia prima del SEO. Si el usuario encuentra buen contenido en nuestro sitio, seguro volverá, lo recomendará, lo linkeará, y eso mejorará su posicionamiento. La receta para un éxito en posicionamiento web: buen contenido con un buen trabajo de SEO.
Mito 8: «Si nuestra web está primera en Desktop, también estará en Mobile»
Hace ya más de un año que Google penaliza en mobile los sitios que no son responsive. Pero hay varios aspectos que tiene en cuenta más allá de si un sitio tiene versión móvil: que se visualice correctamente, que los botones táctiles no estén demasiado cerca, que la fuente sea demasiado pequeña. Muchos sitios que están muy bien optimizados para los resultados en escritorio no logran una buena posición en mobile por estos factores.
Mito 9: «El diseño no tiene peso en SEO»
La Web Performance Optimization (que implica velocidad de carga, elementos lo más livianos posibles) es fundamental para el posicionamiento, no solo porque los usuarios rechazan los sitios muy pesados sino porque ocupan menos lugar en los servidores de Google. A esto se suma que el diseño debe ser funcional y cumplir con el objetivo para el que el sitio fue creado.
Mito 10: «El SEO da resultados inmediatos»
Los tiempos en SEO son muy variables, y dependen tanto de la competitividad del rubro como de los objetivos planteados. En general, entre los dos y tres meses de trabajo se empiezan a ver resultados notorios en tráfico y posicionamiento. Pero hay que tener en cuenta que el trabajo en SEO no se basa en una acción puntual, sino en una estrategia a largo plazo. Conseguir mil enlaces en un día no va a tener buenas consecuencias (y es hasta «sospechoso» para Google) si después no hacemos más nada.
Muchos clientes tienen una urgencia comercial y creen que SEO lo solucionará, pero para eso es mejor una campaña fuerte en SEM. El crecimiento orgánico debe ser sostenido. Para que el SEO logre máximo potencial se requiere un trabajo planificado de al menos seis meses, y luego seguir midiendo y optimizando los resultados de la campaña. En un mundo digital donde todo parece instantáneo, desde la industria hay que concientizar a los clientes para que también sepan tener paciencia.
