13 películas de terror con las que nos identificamos en Social Media
Dar “publicar” a un tuit personal y darte cuenta que estabas logueado en el Twitter de una marca puede ser más aterrador que entrar a la casa embrujada de «El Conjuro». La idea de “crisis” en redes sociales nos da más miedo que la invasión zombie del “Amanecer de los Muertos”. Y siempre está el temor a ese posteo que consideramos gracioso y termina siendo un chiste malo que enoja a tus fans y mata tu reputación, como el payaso de “It”.
Si son lectores de este blog, saben que nos encantan los paralelismos con la ficción. Por eso aprovechamos Halloween para ver con qué otras películas de miedo alguna vez nos identificamos si trabajamos en digital.
1. Freddy Krueger: la idea que no te deja dormir
Quienes trabajan en digital y vieron alguna de las ediciones de “Pesadilla en Elm Street” sin duda se identificaron con los protagonistas ojerosos y somnolientos. Todos hemos pasado noches en vela por causa de esa idea que no termina de salir, que se cuela en nuestros sueños y nos despierta de un sobresalto, más persistente que Freddy en Elm Street.
2. Michael Myers (“Halloween”): el promoadicto que siempre vuelve por más
El mismo escalofrío que produce ver a Michael Myers al final de un pasillo es el que sentimos cuando un “promoadicto” participa en el sorteo de nuestra marca, interesado solamente en un blanco: el premio. Igual que Michael (que a lo largo de la saga fue quemado, mutilado, dado por muerto mil veces), el promoadicto siempre vuelve a atormentarnos, por más que lo desterremos cada vez que aparece.
3. Jason Vorhees (“Martes 13”): el anuncio que te persigue hasta el fin
El asesino de la saga Martes 13 también tiene un máster en resucitar una y otra vez para aterrar a sus víctimas. Pero su modus operandi es más similar al de las campañas de retargeting: si llegás a su territorio (el campamento en la peli, la landing page en digital), te persigue implacablemente hasta ultimarte.
4. “El Hombre Sin Sombra”: cuando el alcance orgánico es nulo
Uno de los mayores temores en Social Media es que nuestro posteo sea invisible. El cada vez más limitado alcance orgánico de Facebook se empeña en convertirnos en “El Hombre Sin Sombra”. Solo que, a diferencia de Kevin Bacon en la peli, nosotros no disfrutamos de ese superpoder: nuestra fórmula mágica está en buscar contenidos que destaquen todos los días entre los cientos que componen las redes.
5. “Psicosis”: el trastorno de personalidad múltiple por manejar varias marcas
Apropiarse del tono, voz y personalidad de cada marca en cada posteo puede provocar en el Community Manager el síndrome de Norman Bates: «todos nos volvemos un poco locos a veces«. Sobre todo si deben adquirir la identidad de una madre o gestionan la red de algún hotel.
6. “Frankestein”: la marca sin identidad definida
Sin dudas, preferimos el trastorno de personalidad múltiple al pasar de una marca a otra, a que el feed de nuestra marca parezca el monstruo de Frankenstein, creado por una suma de partes distintas sin una personalidad única.
7. “Scream”: ese usuario que solo se comunica para “matarte”
Toda marca ha afrontado alguna vez a ese fan que, como inspirado por el asesino de Scream, se comunica en las redes solo para amenazar, quejarse o hacer comentarios negativos gratuitamente. Y como gestores de redes, ya hemos desarrollado habilidades de lucha al estilo Sidney Prescott para sobrevivir a ellos.
8. “Drácula”: cuando otra marca vampiriza tu idea
La “vampirización” de contenidos es uno de los terrores que aletean en la noche de las redes sociales. Hemos visto marcas importantes “succionar” la idea de otras, que no tuvieron el cuidado de registrarla debidamente. O incluso casos de “vampirismo” dentro del mismo mensaje publicitario, donde los receptores recuerdan el contenido, pero no la marca.
9. “El Hombre Lobo”: terminar convertidos en la competencia
Hablando de colmillos, un riesgo que merodea en redes sociales es mirar demasiado lo que hacen las marcas de la competencia y terminar transformados en ellas cual Hombre Lobo. Cuando este peligro acecha, la originalidad y autenticidad son nuestras balas de plata.
10. “Los Pájaros”: la crisis contagiosa
A veces basta un error de tipeo para que los fans desaten sus críticas furiosas. Como en Los Pájaros de Hitchcock, un solo fan contrariado parece inofensivo, pero el terror llega cuando los ataques son en bandada y amenazan con provocar una crisis.
11. “El Resplandor”: enloqueciendo por escribir mil veces la misma respuesta
El trabajo en digital suele ser muy gratificante a nivel creativo. Pero al igual que Jack Nicholson en El Resplandor, no estamos todo el tiempo desplegando nuestros dotes literarios. Muchas veces, en realidad, estamos atendiendo consultas de los fans y escribiendo mil veces las mismas respuestas.
12. “El Proyecto Blair Witch”: cuando la transmisión en vivo no era tan sencilla
Hacer livestreaming desde el celular no es tan fácil como parece. Una batería que no estaba al 100%, un pulso algo ansioso y un montón de gente pasando entre la cámara y nuestro objetivo, y el ejercicio de filmación se puede convertir el mismísimo Proyecto Blair Witch.
13. “El Juego del Miedo”: estar sin Internet
Despertar en un lugar oscuro, atados de pies y manos, sin poder comunicarnos con nadie: la escena inicial de Saw describe perfectamente la sensación de quedarse sin Internet, la peor pesadilla de un marketer digital.
Así es, algunas veces el mundo digital puede producir tantos escalofríos como una peli de terror. Pero a quién no le fascina la adrenalina de una buena película de miedo, sobre todo si contamos con la estrategia adecuada (y el amor por lo que hacemos) para poner Stop.